miércoles, 5 de diciembre de 2012

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Sun ha cumplido sesenta años (¡quien lo diría!) y su marido me ha hecho un encargo, porque para algo son mis mecenas, ¿no?.

Como recordaréis, hice unas piezas por encargo con unas cornalinas que habían sobrado de unas invitaciones de la jubilación de Lina. Unos de los invitados, por supuesto, eran mis suegros, que también han decidido darle una segunda vida a la piedra en cuestión.

Así que a pensar otra aguja distinta con unas de las piedras más irregulares con las que he trabajado, pero  con unos clientes como estos no me podía negar!!.

¿Que os parece el resultado?




 

2 comentarios:

Claudia dijo...

Raquelinha!! me encanta lo que haces!!! enhorabuena!!

Raquel Domínguez dijo...

Si tu quisieras harías cosas mejores!